Cuando pensamos en la telemedicina, nos imaginamos a pacientes siendo atendidos por profesionales de la salud a kilómetros de distancia, y aunque esto sea correcto en su totalidad, la telemedicina también posee la característica de poder complementarse con las atenciones presenciales.
Esta complementación entre los dispositivos para telemedicina y las atenciones presenciales se dan en casos muy específicos (los cuales comentaremos más adelante) que permiten sacarles el mayor provecho a los dispositivos desarrollados para llevar a cabo atenciones a través de la telemedicina.
A continuación, detallamos los casos en el que la telemedicina se convierte en aliado perfecto del médico y del paciente, con el único fin de poder brindar una atención médica más completa y de mayor calidad.
Como ve, los dispositivos para telemedicina no necesariamente deben ser utilizados de forma remota, sino que también pueden complementarse con las atenciones presenciales, las cuales muchas veces carecen de equipos o de la cantidad de profesionales necesarios.
Además, estos dispositivos médicos suelen ser más fáciles de transportar. Esto permite que la atención sea más práctica y sencilla para los pacientes de forma presencial, sin la necesidad de tener que trasladar equipos pesados de un lugar a otro.
Otra ventaja que los dispositivos médicos para telemedicina la ofrecen a las atenciones presenciales es que el doctor no tendrá la necesidad de anotar los datos obtenidos en el paciente, ni mucho menos rellenar una historia clínica en un papel que podría perderse o deteriorarse, sino que estos equipos para telemedicina le ofrecen al médico una plataforma digital en los que podrán añadir todo el historial clínico del paciente.
Estas plataformas, en su mayoría vienen integradas con los propios dispositivos médicos, por lo que el doctor tendrá acceso a la consulta que realizó el día 1, así como la consulta que realizó el último día. Esto permite que el profesional de la salud tenga un panorama más amplio del progreso del paciente.
Este historial clínico digital se complementa con datos que van desde grabaciones de video y audio (realizados por los equipos médicos para telemedicina), así como información recogida por el médico como temperatura, saturación de oxígeno en la sangre, ritmo cardíaco, entre otros.
En resumen, la telemedicina y los dispositivos para telemedicina, no han llegado para reemplazar las atenciones presenciales, sino para complementarlas y ayudarlas a llevar la atención médica al siguiente nivel, aquel nivel que le brinda a los pacientes mayor comodidad y seguridad.
Te podrían interesar los siguientes artículos:
Telemedicina en pacientes con diabetes: Control y prevención
¿Cómo la telemedicina reduce los reingresos hospitalarios?
¿Cómo a través de la telemedicina se puede tratar a pacientes crónicos?